Dejando a un lado a un reducido número de personas, las
cosas que más amo tienen que ver, todas, con el arte y con la cultura: la
literatura, la música, el cine. Y no siempre por ese orden.
Aparte de los momentos vividos con ese reducido número de personas, mis mayores retazos de «felicidad» están ligados al placer y a la emoción que provocaron en mí la lectura de un libro, la escucha de un disco o el visionado de una película. Ahí está todo. La grandeza y la miseria humanas. La ambición y la lucha. El fracaso y la pérdida. Absolutamente todo.
Nacemos en un lugar y en una familia concretos, e impuestos, y eso marca de un modo ineludible nuestra existencia. Pero luego entran en juego otros factores: la gente que conocemos y con la cual nos relacionamos (la que amamos y nos ama, la que detestamos y nos detesta), los sitios que frecuentamos, las ciudades que visitamos y los libros, la música y las películas que consumimos.
Eso es lo que da cuerpo a nuestra memoria sentimental; la savia de la que por fuerza se nutre y que influirá de manera determinante en nuestros pasos presentes y futuros, y en el trato con nuestros congéneres. El equipaje cultural, en fin, que vamos ampliando día a día, hasta que todo se apague.
Y no hay mejor forma de analizar al ser humano que a través del arte. Ya que este está hecho por hombres y contiene, ya digo, unos elementos comunes, extremos, con los que todos nos identificamos porque de ahí venimos y en eso andamos y andaremos siempre.
De eso es de lo que trata este blog. No de la crítica feroz ni clientelista de una obra o de su hacedor, sino de las sensaciones que esos trabajos, miradas y personalidades despiertan en quien suscribe, y del análisis libérrimo de los mismos.
Habrá, pues, reseñas, recomendaciones, retratos exprés, crónicas, entrevistas y todo aquello que ayude a enmarcar el aliento creador de un músico, un escritor, un director de cine o un actor.
La vida en sangre viva y el arte en vena. Así entiendo yo este tremendo lío en el que estamos inmersos y así os lo voy a servir. Ojalá que lo disfrutéis.
Buena suerte.
Enhorabuena, Javier, por este blog. Sin duda un rinconcito puro donde asomarse al arte de la vida y a tu modo de ver ese arte. "Arte en vena" es tu sangre.
ResponderEliminarDe modo que yo también estoy de enhorabuena, pues como a mí me apasionan prácticamente las mismas cosas que a ti, tengo y encuentro en este blog un bello refugio, bohemio y decadente, donde leer en tu hermosa prosa nuestras pasiones comunes. Aquella canción, ese poeta, el artista de rock, la película... todo lo que ha ido conformando la gloria y las miserias de una vida entera.
Va un abrazo sensible y decadente, bohemio y desorientado.
Samuel